Hasta las narices

Como diría Alfonso Solans... "¡Estamos hasta el gorro!" Así es como estamos algunas personas que seguimos al Real Zaragoza.
Alguno de los que allí trabajan se quiere reir de todos. ¿Cómo puedes de cir que no has estado interesado en Cavenaghi? ¡Venga, por favor! No más mentiras.
Lo más fácil es despellejar al mensajero. Mal está dar por cerrado un fichaje sin que haya confirmación oficial, pero lo que está pasando con el zaragocismo es fruto de los medios. Mucha culpa también es de los que ya sabemos...

Los más acérrimos forofos despachan espuma por sus bocas contra los medios que nos hemos equivocado. ¿Inventamos? No. ¿Contrastamos las noticias? Doy fe que sí. Que nos engañen... ahí ya no podemos hacer nada.
De todas formas, todos nos equivocamos. ¡TODOS! Hasta que se cree que no no se equivoca. Y el que no haya metido la pata nunca en su trabajo... en fin.

Hay algo que tengo clarisimo. ¡Qué mala es la envidia! De verdad. ¡Qué fácil es criticar y descalificar! ¡Qué bonito es insultar desde el anonimato! ¡Qué sencillo es decir lo que tenemos que hacer los unos o los otros!...

Que nadie dude de mi zaragocismo. No soy forofo, como otros. Intento ver más allá del color blanquillo, pero lo que no me gusta es que me tomen el pelo y se rían de mí ni de mi trabajo, o el de mis compañeros, que son tan cualificados o más que los que se creen en poder de la verdad absoluta.