Bendita cuesta de enero

Se acaba el mes de enero y, deportivamente, el equipo parece haber despegado. El Real Zaragoza ha sumado 4 triunfos en 5 partidos disputados. Sólo cayó en Barcelona, ante el Español, en un desafortunado partido en Cornellá El Prat. Levante, Real Sociedad, Deportivo de La Coruña y Málaga cayeron derrotados ante el que quizás sea el equipo que más ganas le pone en el campeonato.

Muchas veces los partidos se ganan con el corazón. Y el Real Zaragoza va sobrado de eso. Claro que el corazón sin talento no asegura el éxito. Y menos en Primera División. La salvación está lejana, pero el verse con 4 puntos de ventaja cuando, hace apenas un mes, la situación era el revés (a 4 puntos de la salvación) pues es una inyección de moral para el zaragocismo que tiende a taparse un poco los ojos y a no ver las carencias que tiene el equipo.

El Real Zaragoza ya no está en puestos de descenso, pero el fútbol que hace es el mismo que el que ha desarrollado desde principio de temporada, hasta el relevo de Gay y la posterior llegada de Aguirre. Quizás un poco más de garra, algo de táctica… pero sobre todo, lo que más ha cambiado en este último mes ha sido la suerte.

La suerte, nos guste o no, es un factor muy importante en el deporte. Esa suerte va muy ligada al dicho “el fútbol es un estado de ánimo”. Cuando las cosas salen y el equipo gana la tendencia es positiva y la forma de afrontar el siguiente partido, consciente o inconscientemente, es otra diferente que tras una o dos derrotas consecutivas.